28/08/2017

La fuerte demanda de soja impulsa los valores en Chicago

Los analistas estiman que los rindes de la oleaginosa en Estados Unidos no serían tan malos como lo proyectado en un comienzo. El trigo muestra una recuperación técnica en el plano internacional. ÁMBITO

DANTE ROMANO
Profesor e investigador (*)

Mientras crece la idea de que los rindes norteamericanos no serían tan malos, la demanda de soja se calienta en el mundo

Los precios de los granos se desacoplaron la semana pasada. Mientras que en Chicago el maíz cerró la semana con nuevas bajas, la soja y el trigo lograron recuperar algo de lo que habían bajado previamente. El foco está puesto en la discusión de rindes en EE.UU, la demanda de soja eleva sus precios y el trigo muestra una recuperación técnica.

Además la semana pasada se realizó el Farm Journal Crop Tour, en el cual productores y analistas recorrieron la zona núcleo maicera y sojera de EE.UU. analizando el potencial de los cultivos. Esta gira se inscribe en el contexto de fuertes dudas sobre las proyecciones de rendimientos que el USDA realizó en su informe de agosto. Los datos oficiales sorprendieron a los analistas por ser elevados a los analistas, aunque no parecen razonables teniendo presente la lectura de la calidad de cultivos que el propio USDA viene relevando.

Si bien los resultados marcaron rindes más bajos que los pronosticados la diferencia no fue tan grande. En maíz el Crop Tour estimó un rinde de casi 105 qq/ha, 1,5 menos que el dato del USDA. Dado que EE.UU. siembra casi 34 millones de hectáreas esto implica un impacto negativo en la producción de unas 5 millones de toneladas. Con stocks en torno de 58 millones la variación no resultaría tan significativa.

En tanto para la soja el Crop Tour proyectó 32,6 qq/ha sólo 600 Kg menos que lo pronosticado por el USDA en agosto. Si bien esto multiplica por una superficie de casi 36 millones de hectáreas, hablamos de 2 millones menos de producción, cuando las existencias de soja EE.UU. se proyectan en 13 millones de toneladas.

De todas formas estos datos distan de ser finales. Habrá que ver qué ocurre cuando ingresen las cosechadoras con el maíz. Recordemos que este cultivo tuvo calor y seca en el momento de la floración en el oeste, por lo que el potencial de recuperación en esa zona es bajo, pero habrá que ver cómo compensa el resto de la región. En soja, en tanto, el final está más abierto, y el clima en agosto fue mejor que en julio, ayudando a la formación de vainas. Por ello la posibilidad de que en soja los rindes sean estos que estamos viendo es mayor que en maíz.

Pero la buena noticia en el mercado de soja fue la marcha de la demanda. Las exportaciones norteamericanas siguen muy firmes, con interés de parte de China, y a esto se le suma la novedad de que al prohibir en los hechos la importación de biodiésel de Argentina e Indonesia, el consumo de aceite en EE.UU. subirá, presionando la compra de poroto de soja con el fin de apuntalar la demanda.

Claro que la dificultad para enviar biodiésel a EE.UU. es para Argentina un problema. Para el productor lo primero que se verá es que desaparece la prima de EPA. Pero además EE.UU. es el 90% de las exportaciones de biodiésel locales, por lo que las industrias tendrán problemas y esto obviamente no es bueno para nuestro sector. Como el margen adicional del negocio del bio no se traslada a precios del poroto, el impacto será más bien general en ese sentido, pero con márgenes muy bajos para la industria aceitera esto agranda la posibilidad de que baje la molienda en la última parte del año.

Algo para destacar del mercado interno es que en el caso del trigo se van ajustando las superficies estimadas por las dificultades para la implantación. Finalmente el incremento de superficie sería sólo del 5%. En tanto en Brasil la helada de julio empieza a mostrar los problemas que implicó. En Paraná redujeron en 200.000 toneladas la producción esperada. Juntando la menor oferta argentina con mayores necesidades en Brasil podríamos encontrar una presión de cosecha más baja que lo esperado, aunque esto dependerá de los rindes.

Finalmente en lo que hace a maíz, con la trilla entrando en etapas finales, se observa que en el último mes se frenaron las ventas. Queda mucho maíz por colocar, pero los precios no resultan atractivos. El problema es que al ser guardado en silos bolsa y con humedad, la mercadería podría deteriorarse cuando llegue el calor del verano. Podemos esperar presión de ventas sobre fin de año.


(*) Del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.