Cada vez son peores los pronósticos regionales de pérdidas agrícolas y ganaderas como consecuencia de la extensa sequía. EL CRONISTA

El gobierno de Paraguay admitió ayer que el 40% de los cultivos fueron afectados por el fenómeno y un escenario similar se proyecta en la zona sur de Brasil, donde, sin embargo, se esperan lluvias para los próximos días. En Uruguay, en tanto, la Dirección Nacional de Meteorología (DNM) emitió una alerta roja debido al alto riesgo de incendios forestales.

Las lluvias en la región agrícola del sur brasileño llegarían en los próximos diez días, aunque serían bajas en áreas donde se está perdiendo producción por falta de humedad, estimó la firma de pronósticos Somar. Uno de los mayores estados productores de soja es Río Grande do Sul, que recibiría precipitaciones entre el sábado 14 y miércoles 18. Los analistas estiman que como en este estado el cultivo se siembra más tarde que en otras regiones, la soja podría resultar ilesa si efectivamente llueve.

El mismo patrón de lluvias, primero ligeras y luego mayores, también se prevé en Paraná, el principal estado productor de maíz de Brasil, donde la sequía ya causó pérdidas irreversibles. La semana pasada, Paraná, Río Grande do Sul y Santa Catarina rebajaron sus estimaciones para sus cosechas. La agencia gubernamental Conab dará a conocer hoy su propia proyección actualizada de los cultivos de todo el país, luego de que la consultora Celeres previera una producción de soja de 74,4 millones de toneladas, menor a los 75,6 millones proyectados en diciembre. Para el maíz, redujo su cálculo a 61,98 millones de toneladas desde 63,32 millones.