El balance del trigo nuevo muestra una menor producción global, que absorbería parte de los altos stocks de los últimos años. En maíz, las proyecciones son bajistas para los precios por una suba de la producción mundial. Lorena R. D`Angelo. LA VOZ.

Los mercados agrícolas tuvieron una semana con fuertes vaivenes, en un comienzo, negativo para los precios futuros en Chicago y cierto seguimiento del mercado local.

Se registraron tomas de ganancias en los precios de la soja por las cancelaciones de posiciones de los fondos especuladores frente a la publicación del informe mensual del Usda. Hasta el jueves la soja tuvo importantes bajas mientras que los cereales acompañaron pero con un impacto mucho menor, sostenido por los bajos niveles de existencia de maíz estadounidense.
Los datos finalmente publicados por el Usda trajeron algunas sorpresas respecto de las expectativas iniciales de los operadores que esperaban ajustes a la baja en las existencias de los principales productos estadounidenses.

Para la campaña 2011/2012 se recortaron los stocks de soja y trigo mientras aumentaron los de maíz. Los primeros disminuyeron por una mayor demanda de exportación que, para la soja, refleja la menor oferta sudamericana y la actividad importadora por parte de China. Para el maíz los stocks aumentaron por bajas en el consumo forrajero y residual ante la sustitución del cereal por trigo forrajero que tiene una suba de producción y precios más atractivos. Los stocks pasaron de 20,3 millones de toneladas a 21,6 millones, frente a expectativas previas de los operadores de un recorte en los stocks.

A pesar de los cambios mencionados la atención se la llevó la publicación de las primeras proyecciones para la campaña 2012/13. El balance del trigo nuevo muestra una menor producción global por menores cosechas en Argentina, Australia, la UE, Kazajstán y Ucrania, compensado por incrementos en Canadá y Estados Unidos. De esta forma una menor oferta absorberá parte de los altos stocks que el cereal estaba acumulando.

Para el maíz las proyecciones son bajistas, ante un incremento en la producción mundial del orden de las 75 millones de toneladas, de las cuales 61,7 millones corresponderían a Estados Unidos. Los datos del principal productor y exportador mundial del cereal es el principal limitante a mejoras en las cotizaciones futuras, con niveles de stocks que aumentan un 121 por ciento respecto de esta campaña.

El contexto bajista para el cereal se contrapone con datos que resultan alcistas para la soja. Si bien se proyecta inicialmente un aumento en la producción estadounidense, con una menor cobertura de siembra pero rindes récord proyectados, un incremento en la demanda absorbe stocks.

Las existencias proyectadas para el 2012/13 son de tan sólo 3,94 millones de toneladas, un 31 por ciento debajo de la presente campaña y llevando la relación stock/consumo al 4,4 por ciento, el nivel más bajo desde la campaña 2003/04.

Como respuesta a los datos publicados, el mercado de Chicago recuperó parte de las pérdidas iniciales de la soja y cerró casi neutral para los cereales. Localmente hubo ajustes en las estimaciones pero poco impacto en cotizaciones: la soja finalizó con bajas respecto de la semana previa y los cereales con pocos valores y malas perspectivas para el 2012/13.