La Ley 25.602 deroga la Ley 20.840 de "Subversión Económica". Recordemos que ésta última establecía el tipo penal mediante el se reprimía con prisión a quien con ánimo de lucro o maliciosamente, enajenare indebidamente, hiciere desaparecer, ocultare o fraudulentamente disminuyere el valor de los patrimonios de las explotaciones comerciales, industriales, agropecuarias, mineros o destinado a la prestación de servicios. Las penas se agravaban cuando el hecho causare perjuicio a la economía nacional o pusiere en peligro la seguridad del Estado. La ley también sancionaba a directores, gerentes, síndicos, y administradores de personas jurídicas, e inclusive a aquellos que lo cometieran por imprudencia o negligencia. La Ley 25.602 también agrega una modificación al art. 174 del Código Penal, el que al tratar de Estafas y Otras Defraudaciones incorpora prisión de 2 a 6 años a quien en forma maliciosa afectare el normal desenvolvimiento de un establecimiento o explotación comercial, industrial, agropecuaria, minera o destinado a la prestación de servicios o destruyere, hiciere desaparecer, ocultare o fraudulentamente disminuyere el valor del patrimonio de una empresa. De esta manera se deja a salvo un aspecto derogada pero encuadrado esta vez dentro de los Delitos de Estafa. Por último, mediante el Decreto de Promulgación 1059/2002 se observa (veta) el art. 4º de la Ley 25.602, el que reprimía con prisión a quien por imprudencia o negligencia o violando los deberes a su cargo, cometía o prestaba su consentimiento a la realización de los actos antes enumerados.